El verdadero amor de una madre

Cuando somos niños, no existe amor más grande que el que sentimos por nuestra madre. Ella lo es todo para nosotros y no podemos concebir nuestra vida sin su presencia; sus besos, sus caricias, el tiempo que pasa con nosotros, es lo mas hermoso de nuestra infancia, y todo ese amor va a condicionar nuestro futuro.
Vamos creciendo, y al llegar a la adolescencia ese amor no disminuye, pero si se transforma; necesitamos a nuestra madre, a nuestros padres, pero de otra forma; ahora son los amigos el centro de nuestra atención, ellos se convierten en lo mas importante, pasando nuestros padres a un segundo plano...
Y así llega el día en que conocemos a nuestra pareja; el amor que experimentamos es nuevo, es diferente, ella o el se hace el centro de todas nuestras atenciones, ya no existe nadie mas perfecto, deseamos estar en su compañía a todas horas...; y aunque los amigos siguen siendo importantes, pasan a un segundo plano ¿y los padres?...a los padres también los queremos, por supuesto, los necesitamos y nos importa su opinión....pero los padres pasan ya a un tercer plano...
Y así, un día decidimos tener hijos, convertirnos en padres.... y el amor a ese hijo pasa a encabezar la lista de prioridades; y curiosamente, ahora te pones en el lugar de tus padres y descubres que los comprendes mejor que antes , comprendes sus temores, el porque de sus enfados, sus consejos... y, de pronto te das cuenta del amor tan grande que sentías por ellos cuando eras niño, y descubres que ese amor es el mismo que ahora sientes tu por tus hijos, un amor incondicional, que te llena el corazón, y no hay nada ni nadie que te pueda hacer sentir igual.....
Existen muchas formas de amar, muchas personas a las que queremos de diferente forma, y según el momento que estemos atravesando en nuestras vidas, necesitaremos del cariño de unos mas que de otros, pero siempre los necesitaremos a todos, saber que nos quieren y quererlos, porque todos son importantes para nosotros y todos han aportado algo a lo largo de nuestra vida y han contribuido a hacer que nos convirtamos en las personas que ahora somos; el amor nos hace crecer como personas,y cuanto más amor seamos capaces de dar, más creceremos.
El vídeo que os muestro a continuación es un ejemplo de lo que el amor puede hacer en el ser humano; el amor puede hacer tan grande a una persona que haga que piense solo en los demás, el amor logra hacer pequeños los grandes problemas, pues siempre habrá alguien que esté tan necesitado de amor que consiga que te olvides de ti mismo...
                           
                                                         

"Si el mundo te da un motivo para estar triste, muéstrale que tienes miles para estar contento"

 Laura.-