miércoles, 15 de julio de 2020

MASCARILLA SÍ, SEGURIDAD TAMBIÉN


En Andalucía, una de las principales prioridades dentro de las estrategias de Seguridad del Paciente que plantea la Consejería de Salud, es instaurar una política de actuación en cualquier ámbito dónde se atiende al ciudadano, para prevenir, detectar y actuar ante las caídas.

Ya existe este procedimiento de prevención, pero no contábamos con un elemento nuevo, que por varios factores incrementa el riesgo y provoca también otro tipo de lesiones, asociadas o no a la caída en sí (traumatismos, contusiones, esguinces, atropellos, incluso disputas peligrosas).
Se llama mascarilla y desde hoy 15 de Julio de 2020 es obligatorio llevarla en lugares públicos en Andalucía.
Os relato varios acontecimientos vividos en primera persona que me hacen plantear la necesidad de comunicar los riesgos del uso de la mascarilla, para implementar con urgencia una conducta de prevención de caídas/traumas en todos los ciudadanos.

.ꟷ Acudo a mi trabajo como enfermera en un Centro de Salud. Voy con paso ligero y con mascarilla. Tropiezo en un bordillo casi invisible y caigo de bruces contra la acera. Por supuesto nadie se acerca, es el comienzo de la pandemia covid-19

.ꟷ Desde mi consulta escucho un estruendo a media tarde. Un muchacho ha caído por las escaleras; lleva mascarilla y dice no haber visto las líneas negras que señalizan los peldaños. Solo se ha contusionado la rodilla pero no precisa atención médica.

.ꟷ Una usuaria expresa que al ponerse la mascarilla “parece que no escucha”

.ꟷ Otro usuario manifiesta: llevo las gafas completamente empañadas con la mascarilla, no veo nada.

.ꟷ Estoy en un restaurante. El camarero sube y baja las escaleras que comunican con la cocina. De pronto suena un estrepitoso crujir de platos. Acaba de caer al suelo, se escusa diciendo que es debido al largo delantal. Lleva su mascarilla

.ꟷ Un compañero de trabajo me dice: Llevo lentes progresivas. La mascarilla se interpone entre el ojo y la parte inferior de la lente de manera que dificulta la visión de cerca. Tengo miedo de caerme.

.ꟷ Voy conduciendo mi coche. Una señora con mascarilla cruza por mitad de la calle. He visto como giraba su cabeza hacia mí, pero no me ha visto. Se sorprende al ver la cercanía del vehículo y mi frenazo.

.ꟷ Leo el informe de alta hospitalaria de mi paciente: fractura de fémur por caída tras agresión. Un joven le ha empujado al recriminarle por no llevar la mascarilla.

Sin duda son solo un ejemplo de las miles de situaciones que vivimos a diario relacionadas con este nuevo complemento en nuestra vida cotidiana: la mascarilla.
Observemos que para prevenir un riesgo (el de infección) provocamos otro riesgo (el de lesión o caídas)
Todo esto debe hacernos reflexionar y alertar a la población a la vez que indicamos la necesidad del uso de la mascarilla. Los slogans deben incorporar además de mensajes de responsabilidad, protección o solidaridad, información sobre riesgos y conductas de prevención de caídas y/o traumatismos.

Por otro lado, las estrategias de prevención, integrales y diversas deben:

  • dar prioridad a la investigación y a las iniciativas para definir la prevalencia, conocer los factores de riesgo y utilizar estrategias preventivas eficaces.
  • crear entornos más seguros que reduzcan los factores de riesgo.
  • fomentar medidas técnicas que eliminen los factores que posibilitan las caídas.
  • impulsar la formación de los profesionales sanitarios en materia de estrategias preventivas basadas en evidencias científicas.

Eloisa