martes, 24 de agosto de 2021

Música para la demencia

 

El guitarrista ciego. Picasso

Ya son varias las entradas que hemos aportado a este blog relacionadas con la demencia en el anciano. Hay muchas razones de peso: la prevalencia de la demencia aumenta a la vez que la edad media de nuestros mayores también lo hace, la sobrecarga que esta enfermedad genera en las personas cuidadoras y las dificultades e inseguridades en su abordaje.

Como profesionales necesitamos revisar nuestros modelos de atención en demencia, una de las cronicidades que incluye a pacientes más frágiles, priorizando siempre la dignidad de la persona.

Tanto el profesional de atención primaria como el cuidador, deben intentar empatizar con la persona afectada, tener en cuenta sus necesidades, sus sentimientos y desarrollar o mantener en la medida de lo posible su individualidad y autonomía.

Las personas con demencia pierden el sentido del aquí y el ahora, se desorientan, son conscientes en muchas ocasiones del progresivo deterioro que sufren, lo que desencadena sentimientos de angustia, confusión, desconfianza, ira o tristeza. La necesidad de expresar sus emociones, en muchas ocasiones, se ve truncada por la pérdida progresiva de las capacidades cognitivas. A menudo encontramos personas con demencia que poseen grandes dificultades para reproducir o comprender el lenguaje verbal, sin embargo son capaces de cantar una canción.

Una melodía conocida puede evocar de forma inmediata una emoción, una sensación o un recuerdo del pasado, devolviendo a la persona con demencia el sentimiento de identidad, seguridad y familiaridad. El cuidador puede observar como de repente, escuchando una canción conocida, se despierta en su familiar con demencia un interés extraordinario, una alegría en sus ojos y en sus gestos que lo sorprenderá. Es la alegría de una mente "dormida" que ya no puede elaborar una frase con sentido y que de pronto siente la satisfacción de ir encadenando sin dificultad las estrofas de una canción.

Conozco a una cuidadora que viendo el interés y la alegría de su familiar escuchando algunas canciones reunió los éxitos musicales de los años de su juventud (años 40 y 50) y que comparto en este enlace:   El día que nací yo

Un video de YouTube cuya protagonista es una anciana con Alzheimer que fue bailarina y que despierta al escuchar "El lago de los cisnes" es conmovedor

Os animo a que incorporéis esta terapia en el día a  día de vuestro familiar con demencia, porque la música no solo le aportará beneficios al enfermo, también tendrá un efecto positivo en quien lo cuida.


 Eloisa


2 comentarios:

  1. La música es maravillosa para todo el mundo. Personalmente llevo la música en mi ADN y desde pequeño me he criado junto a ella. Mi enhorabuena a esta iniciativa, que sin duda hará mucho bien tanto a pacientes como a cuidador@s.

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  2. Así es Juan Carlos, es poderosa. Gracias por tu comentario

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